Diferencias, diferencias
¿Porqué no equipos de fútbol mixtos en la primera división?
Ah, ya sé lo que me vas a contestar... Pero (siempre hay un pero) yo te hablo en serio!
Claro, ya me he dado cuenta de las diferencias entre hombres y mujeres (te hago un dibujito?), sin embargo hay algo que ha comenzado a dar vueltas en mi cabeza desde que estoy trabajando en este bendito newsletter. ¿Qué pasaría si en realidad las diferencias que pretendemos existen no fueran tales?
Todo comenzó cuando decidí incluir la sección de deporte y género, así leyendo algunos trabajos pensé (raro) que en realidad la mayor parte de las diferencias entre hombres y mujeres que nos parecen abismales no son otra cosa que imposiciones sociales.
Una mujer practica aerobics para mantenerse en forma. Que bien. Una mujer juega al fútbol. Qué machona.
Ah, ya sé lo que me vas a contestar... Pero (siempre hay un pero) yo te hablo en serio!
Claro, ya me he dado cuenta de las diferencias entre hombres y mujeres (te hago un dibujito?), sin embargo hay algo que ha comenzado a dar vueltas en mi cabeza desde que estoy trabajando en este bendito newsletter. ¿Qué pasaría si en realidad las diferencias que pretendemos existen no fueran tales?
Todo comenzó cuando decidí incluir la sección de deporte y género, así leyendo algunos trabajos pensé (raro) que en realidad la mayor parte de las diferencias entre hombres y mujeres que nos parecen abismales no son otra cosa que imposiciones sociales.
Una mujer practica aerobics para mantenerse en forma. Que bien. Una mujer juega al fútbol. Qué machona.
Son los estereotipos y patrones culturales los que nos condicionan y marcan un papel masculino y otro femenino, diferenciados y pautados según épocas usos y costumbres. Ser mujer es también cumplir el rol que la sociedad se espera que desempeñe.
Desde la infancia más temprana la mujer es llevada a cumplir tareas que la ubican en el rol del "sexo débil". en realidad no sabemos lo que una mujer es capaz de realizar, hasta dónde puede llegar, sin esos condicionamientos.
En donde más se ven las diferencias, y donde se aceptan como naturales es en la práctica de deportes. Claro una mujer no puede, no tiene la fuerza, no... , no... La discriminación de la mujer no es una cuestión sexual, sino social y cultural. La igualdad de oportunidades existe en nuestra sociedad en teoría pero está lejos de concretarse en la práctica. Incluso parte del género femenino actúa de modo de ser funcional y útil a la discriminación. socialmente está mal visto que una mujer se sobreexija profesionalmente a la par del hombre y descuide a sus hijos. ( ¿Podría una madre de familia participar en el Tour de France? ¿Podría existir en Argentina una liga de fútbol femenino profesional similar a la masculina? La pregunta es sobretodo ¿qué dirían los hombres? y ¿qué dirían las demás mujeres?)
Sucede incluso que so pretexto de perseguir la igualdad de los géneros se crean "nuevos espacios de participación para la mujer", en los que ellas pueden actuar, pero con mínimas atribuciones y sin posibilidades de crecer. Estos espacios solo alimentan el viejo sistema.
La igualdad es imposible y no es deseable. Pero lo que es insoportable es la inferioridad en la que se mantiene en muchos ámbitos a la mujer aún haciendole creer que así se le está haciendo un favor.
Si las mujeres llegaramos a establecer nuestra propia definición de femineidad, de género, una que no ponga barreras a nuestras capacidades, yo estoy segura que en la primera división de fútbol todos los equipos serían mixtos.
Etiquetas: Derechos Humanos, Divagaciones